lunes, 27 de octubre de 2008

EL COLOR en la decoración - I



INTRODUCCIÓN

Generalmente cuando utilizamos el color para vestir nuestros espacios nos dejamos llevar por nuestras preferencias personales basadas en nuestra percepción, y, cómo influyen personalmente en nuestra psique, o bien lo empleamos de manera intuitiva.
Los profesionales, además de tener en cuenta las preferencias del cliente que va a ocupar el espacio tenemos también en cuenta otros factores que son verdaderamente importantes.
El Interiorista tendrá presente que ningún color puede ser definido por sí mismo ya que está en relación con cuanto le rodea y en relación con otros colores y cómo influyen entre sí.
También es importantísima la luz, el tipo (natural o artificial y sus variaciones), y cómo recae en la estancia en los momentos de más uso.
Por otra parte el conocimiento amplio de cómo actúan los colores, de su teoría y práctica, nos concede (a algunos de los que estamos acostumbrados a trabajar con el color como herramienta), una percepción más amplia de las tonalidades, las gamas, las saturaciones y las mezclas.
Dónde para unos es un determinado color para mí puede haber varios. Puedo abstraer las cargas y la composición del mismo. Es una de las ventajas de haber jugado con los colores cuando aprendes a crearlos en la paleta.
Con el color se puede modificar las dimensiones de las estancias, tratando este como espacio, como forma, teniendo en cuenta la cinética, la irradiación, las sensaciones, y los efectos psicológicos de ellos.
Los colores pueden crear perspectivas y pueden modificarlas visualmente.
El mundo del color es apasionante. Se ha dicho mucho y se podría seguir hablando.
En esta sección voy a contribuir a dar a conocer o recordar los efectos de los colores y el uso de ellos. Principalmente aplicado en el espacio, pero sabiendo como ha adquirido también unas características basadas en experiencias universales y que hemos aprendido o nos han enseñado, bien culturales, históricas, personales etc.
Por último incluiré cómo se usa el color en el Feng Shui, dónde la tradición histórica y su simbolismo a veces difieren de nuestros conceptos, pero es igualmente útil porque lo empleamos como herramienta para casos concretos.





EL COLOR AZUL




Foto de Antonio del Junco

El azul es uno de los colores fundamentales para conseguir otros, por eso se llama primario, él no es producto de ninguna mezcla.
Se conocen 111 tonos de azul.
Es el color que más le gusta a la gente, a casi nadie le desagrada el azul.
Simbólicamente se le adjudica buenas cualidades en asociación con los sentimientos. Quizás por eso se aprecia tanto.
Es el color de la simpatía, de la armonía, de la amistad, de la confianza.
Es curioso que asociemos sentimientos a los colores. Al azul no se le atribuye ningún sentimiento negativo.
El azul es el color divino (el cielo es azul), el color de lo eterno. La experiencia continuada le otorga al azul la cualidad de lo que permanece.
Pertenece al grupo de los colores denominados “fríos”.Esta consideración se basa en la experiencia.
Nos produce una sensación de lejanía, de infinidad. Por eso el efecto psicológico de este color ha adquirido un simbolismo universal como el color de la fidelidad...
Curiosamente las flores azules (nomeolvides, la de la madreselva) simbolizan la fidelidad. Esto se hace extensivo a algunas costumbres como la anglosajona que en el ritual nupcial se exige a la novia llevar algo azul.
El zafiro es la piedra azul que simboliza la fidelidad (“…la princesa Diana llevó en su boda su anillo de compromiso con el zafiro azul…” Eva Heller).
También es el color de la fantasía, del anhelo, de la ilusión.
Tradicionalmente simboliza el principio femenino. En la pintura antigua es el color que simboliza a la Virgen María. Es muy curioso profundizar en los colores simbólicos de la pintura cristiana.
Sumando cualidades a este color se le otorgan las que van ligadas a las cualidades intelectuales y masculinas (inteligencia, concentración,…)
El color complementario del azul es el naranja.
En el uso del Diseño de Interiores, el color azul se emplea para dar profundidad a los espacios. Se prefiere generalmente azules pálidos, suaves para zonas extensas y es efectivo como color de techo.
El azul en el suelo puede dar la sensación de ingravidez.
Produce espacios relajantes, favorables para el descanso. Ideal para personas o niños que tienen problemas para descansar o relajarse.
Pero si el tono es algo subido y el dormitorio no se compensa con otros colores cálidos puede producir un efecto pasivo que haga que a la persona le cueste poder levantarse.
Mezcla muy bien con el blanco.
Se asocia a la limpieza, a la pureza, y al frescor por eso se ha empleado tanto en baños.
En general los colores fríos y claros en general, en el techo resultan luminosos y originan distensión. Desde los las zonas laterales producen sensación de abombamiento; en el solado son lisos y deslizantes. Sin embargo los colores fríos y oscuros, en general en los techos resultan amenazadores; en las paredes laterales provocan sensación de frialdad y tristeza y en el suelo son pesados y monótonos.
Por eso es importante tener en cuenta el matiz del color y el tono al igual si llevan en su mezcla otras cargas que le acercan a un grado más frío o más cálido.
Goethe dijo: “las habitaciones tapizadas de azul parecen más espaciosas, pero también vacías y frías”
Cómo anteriormente se menciona hay muchos tipos de azul, se les denomina según por sus características, uso u obtención se han bautizado a lo largo de la historia, aquí tenemos algunos destacados:
- Azul ultramar (el más caro de los tiempos se obtenía del lapislázuli, piedra semipreciosa que se traía más allá del Océano Índico, del mar Caspio y del mar negro, es decir más allá del mar).



dos de “Les trés riches heures du Duc de Berry” de los hermanos de Limburg S.XV


-Azul Cobalto.- Para Vang Gogh es el azul divino.
-Azul Índigo.- El azul más importante para los tintes de la ropa desde la antigüedad, ya que era resistente y barato. Se podía obtener de distintas plantas. Era un tinte procedente de la India.
-Azul Prusia.- El color de los uniformes.
-Azul Real.- El azul celeste luminoso era el color de la nobleza. Llamado así desde que Luis XIV se diseñó un jubón azul para su boda con la Infanta María Teresa de Austria.



También existía un azul “plebeyo” ; se teñía el lino y la lana con glasto* quedando un azul turbio, era el color de las clases bajas. El azul es el color dónde menos se nota la suciedad.
En tiempos posteriores se teñiría el algodón y sería utilizado teñido en azul para la indumentaria laboral.
(En 1850 Levis Strauss inventó el “blue jeans” o tejanos, para ser utilizada por los buscadores de oro, y serían teñidos claro, con índigo).
-Azul Turquesa.- Toma el nombre de la piedra preciosa por su color.
-Azul pastel.
-
Azul marino.
-Azul.- Sèvres.-
Tomado el nombre por la porcelana.


FOTO DE ANTONIO DEL JUNCO http://deljunco.com/


“Cuanto más profundo el azul, más llama al hombre a lo infinito y despierta en él el anhelo de lo puro y, finalmente, de lo suprasensible” Kandinsky.





Próximo artículo El azul en el Feng Shui.




*Glasto: (Del Lat. glastum.) m. Planta bienal europea con tallo herbáceo, ramoso; flores amarillas en racimo, y fruto en vainilla elíptica con una semilla comprimida. De sus hojas se saca un colorante semejante al añil, con que antiguamente era coloreado el vidrio. Isatis tinctoria, crucífera.








Arquitecto de sueños - Hilario Camacho

miércoles, 1 de octubre de 2008

CURIOSIDADES DE TRABAJAR CON FENG SHUI



Bien ya es hora de volver a poner al día este sitio para el Hábitat.
La actividad diaria nos quita tiempo para muchas cosas.
Para retomarlo, aunque tengo muchísimas cosas de qué hablar en cuestión de Interiorismo y Decoración, tendencia, diseño, etc (y más sabiendo que andan por aquí algunos de mis exalumnos…) quiero volver a cogerlo por el tema de Feng Shui, quizás porque en estos días me he encontrado en situaciones en que se daban estos asuntos.
Ya expliqué en otro post anterior lo que era Feng Shui y cómo lo abordaba, por eso no lo voy a repetir.
El que se haya interesado un poco por el tema aunque sea solo por curiosidad, habrá podido ver lo ligado que está a la superstición y la fetichería, debido, sin duda alguna a la información que nos proporcionan las revistas y libros dispuestos a vender proporcionando recetas mágicas para solucionar nuestras vidas.
Ese es un mal al que me enfrento en muchas ocasiones.
-“Ah si Feng Shui! (¡porque todo el mundo sabe lo que es el Feng Shui, claro!) Mi mujer se compró un libro y casi me vuelve loco poniendo la casa patas arriba”,”tan complicado que era poner una fuente donde esta el sofá, y cambiar el baño de sitio, y encima girar la cama que quedaba en medio de la habitación que al final dijimos que mejor era vivir sin el Feng Shui”, (por supuesto yo tampoco lo querría)
También es cierto que el cliente que te busca y solicita el estudio para su local o vivienda sabe perfectamente qué te pide y qué quiere, lo que facilita muchísimo el trabajo y la compresión del informe para ponerlo en práctica. Hablamos el mismo idioma o al menos hace más fluida la comunicación aunque no quiere decir esto que quien no sabe exactamente en qué consiste no sea capaz de comprender cuando le explicas lo serio del asunto, e incluso capta la complicidad en el tema y despierta algún sentido dormido y que ignoraba tener, (sutil, ¡claro!), lo que hace que sea un placer estudiar, calcular e interpretar la carta Geomántica que indican las energías de sus direcciones.
Pero los primeros (los más comunes), esos que “saben”, porque lo han leído en la revista semanal que le informa de la actualidad, o los que se miran el primer libro que trata del tema, suponen un reto.
Por costumbre no suelo convencer de nada. Espero a ver si solicitan la información, si es así entonces se la proporciono todo lo espléndidamente que puedo, si no, no.
Luego está la gente, que en su desesperación por solucionar los problemas te largan el muerto esperando que obres milagros en sus vidas. Entonces me toca explicar que el Feng Shui, no es magia, ni budú, ni religión, que sus vidas las han de solucionar ellos, que yo solo les proporciono la manera de encontrar la forma de equilibrar las energías que fluyen a su alrededor, y armonizar el espacio donde viven o trabajan acordemente con lo que el estudio indica, (adecuándolo con la profesionalidad que me da el ser Interiorista), para que no haya estancamiento y así mejoren aspectos de su vida.
El hecho de ser consciente de un problema o estancamiento ya da la cabida a la disposición de encontrar una solución.
Por poner un ejemplo cotidiano: una persona que en la oficina trabaja de cara a la pared y pasa por detrás un constante fluir de personas o tiene una puerta a su espalda; o el que se pasa ocho horas en una habitación oscura, o de color vibrante y agotador, o mal oliente, o poco ventilado, o le apunta algún objeto agresivo que encima no le agrada, etc. Y no digamos nada de en dónde y cómo dormimos, precisamente cuando somos más vulnerables.
El que está sometido a una presión sea del tipo estética, espacial, ambiental… en el trabajo, o en su hogar, sea consciente o no de ello, acabará enfermando o al menos incidirá en su estado de ánimo.
El problema cuando se decide utilizar las herramientas que nos proporciona el Arte del Feng Shui es cómo utilizarlo.
Las recetas de objetos religiosos o no (budas, dioses…) que no tienen que ver con nuestra cultura; colocar aleatoriamente fuentes, carrillones y un sinfín de cosas sin sentido,sin entender si sirven y en dónde y por qué, hacen que tenga esa prensa tan equivocada y ese mal uso.
Luego también te encuentras con la típica persona ciéntifica-racional, que se considera intelectual porque está enterada de todo (pero no sabe de mucho), que te rebate cargado de razones intentando tirar por tierra argumentos que ni siquiera le has dado porque no ha tenido la delicadeza de preguntar tu versión del asunto después de haber estado profundizando en el tema más de diez años; además suele ser despectivo, y suele mirarte por encima del hombro.
Este tipo de sujeto que “habla” de Feng Shui es con la que no trato; directamente no me interesan unos argumentos sin fundamento y mucho menos convencerlo de nada.
El que tiene interés de escuchar cosas que desconoce aunque esté confundido por la información que ha recibido, y al margen de decidir si esto le va a interesar o no en su filosofía de vida, es el tipo de persona con la que me gusta exponer mis experiencias.
Todos, o casi todos intentamos mejorar en nuestra forma de vida, encontrarnos agusto en los espacios que habitamos y con nosotros mismos, y en la manera de relacionarnos.
Cada uno nos reafirmamos en actividades que van acordes a nuestro carácter y personalidad, y nos buscamos la manera de ser más felices a través de ello y estar mejor.
Feng Shui es eso, una herramienta para encontrar el equilibrio de nosotros con nuestros espacios. Y esta herramienta ha sido estudiada durante milenios por otra civilización con una forma de vida y un sentir tan válido como el nuestro. ¡Que bueno aprehender y aprender de cosas que nos permitan mejorar de otros que las han experimentado!
Para terminar y como curiosidad quiero añadir que es sorprendente ver cómo a través de un Estudio profundo con Brújula del espacio y de las personas, te descubre lo que está sucediendo o ha sucedido en un lugar o a sus habitantes sin saber nada de ellos y sin que ellos te lo revelen, eso es algo que nunca dejará de sorprenderme.
Que tengáis un buen fluir de energía en vuestros espacios.